7. Justicia divina

Abel despierta cuando anuncian la llegada de su padre

Hacía mucho tiempo que no lo veía, habían pasado unos meses desde que fue al castillo de la reina y todavía no había vuelto.

-PAPIIIII

El niño baja corriendo a recibir a su padre pero encuentra a alguien que le corta el paso

-Ven aquí, niño, que tu papá vea que somos amigos

Derek los ve. Siente una rabia que jamás había experimentado

-SUELTA A MI HIJO, ZORRA

-Nana, llévate dentro al niño y avisa al sacerdote. Vamos a ajusticiar a una bruja.

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Abel mira desde la ventana. No sabe muy bien lo que está pasando pero se alegra de que le den su merecido a la bruja

-Vamos a purificar tu alma, hija de Lilith, arrepientete de tus pecados

-Derek, por favor, por que me haces esto… TE AMOOOO

-Silencio, furcia de satán. Hermano, trae la antorcha

-Padre, permítame que sea yo el que encienda la hoguera

Y así hace. Jenika grita desesperada e intenta escapar pero no puede, Derek ya se ha encargado de dominarla previamente y que no pueda utilizar sus “habilidades”

-TE QUITARÉ LO QUE MÁS QUIERES DEREK, LO JURO

-Arde en el infierno, bruja de mierda.

-Nana, mañana partirás con el niño a la residencia de verano, Abel no se puede criar aquí

-Lo vas a separar de tu lado? Eres lo único que tiene, el niño necesita a su padre

-Conmigo no está seguro, al menos de momento. Descansa, os espera un largo viaje

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Abel sonríe aliviado al ver que la bruja está muerta, ya no podrá hacerle mas daño

Ve que la nana entra en el castillo y da media vuelta para salir corriendo. No puede pillarlo despierto y fuera de la cama, lo va a castigar seguro.

Pero cuando se gira se queda helado.

-Abelito, pensabas que te habías librado de mí? No, qué va, la muerte no es el fin es solo el principio. Escúchame bien, mocoso

"En tu día más feliz mi oscuridad llegará a ti. De tu sangre y tus lágrimas resurgiré y me alzaré victoriosa mientras en tu corazón solo quedará dolor y desesperanza. Y seré yo tu perdición y conmigo vendrá tu fin y de toda tu casa"

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Después de hacer justicia divina a la bruja tzimisce, Derek sube a la habitación de su hijo. Está durmiendo y siente un profundo alivio de que el niño no sepa nada de lo que está sucediendo

Le resulta muy duro despedirse del pequeño y más cuando está tanto tiempo sin verlo, pero es lo mejor para él, si le sucediese algo por su culpa jamás se lo perdonaría. Lo va a echar muchísimo de menos

"Te quiero, pequeño"